Gensler, crecer globalmente desde el valor de lo local

• A 10 años de haberse instalado en el país, la oficina de diseño estadounidense, una de las más importantes a escala mundial, fue la punta de lanza para abrir el camino en Latinoamérica. Su éxito: el talento humano costarricense.

Siempre he creído que nuestros bisabuelos y tatarabuelos tuvieron un gusto estético exquisito, a pesar de lo aislada y pobre que fue la provincia de Costa Rica en la época colonial. Nuestra herencia indígena de las formas y el detalle, plasmadas en las sobrias vasijas de barro y piedra, y la filigrana de las piezas de oro y jade, dan fe de que aquí el buen diseño corre por las venas, a pesar de los baches de mal gusto que padecimos el siglo pasado cuando acabamos con buena parte de los mejores ejemplos de la arquitectura vernácula costarricense.

Como la vida es cíclica para seres humanos y naciones, esa fue la apuesta de una de las firmas de arquitectura y diseño internacionales más reconocida: Gensler.

Un joven arquitecto costarricense y otro argentino relacionado con la firma, vieron ese y otros potenciales de talento en el diseño costarricense y extendieron la firma hacia Latinoamérica entrando por nuestro pequeño país.

Así lo confiesan los arquitectos Samuel Bermúdez y Christian Wolff, el dúo que lidera Gensler Costa Rica y cuya visión ha permitido abrir oficinas en México, Brasil y, próximamente, Colombia.

Talento y servicio

Comenzaron dos y ahora son 165 personas las que conforman Gensler Costa Rica, cuyas oficinas en el último piso de la Torre Lexus, en Avenida Escazú, reflejan la creatividad, el desenfado, el trabajo en equipo y la visión estética de acompañar a la clientela en todos los procesos que requiera, trabajando con equipos interdisciplinarios, liderados por una persona que dirige a 25 o 35 profesionales más de diversas especialidades.

Desde una marca, un logo, un espacio de retail, hasta un aeropuerto, un centro de trabajo, centros de estudio, hospitales o una ciudad entera, de todo se encargan estos talentosos profesionales en arquitectura, diseño interior, diseño gráfico, fotografía, comunicación, mercadeo y toda aquel profesional que vibre en la frecuencia Gensler.

¿El secreto del crecimiento exponencial? Enfocarse en el trabajo en equipo, multidisciplinario y local sin perder la visión global, afirman Bermúdez y Wolff, cada uno por separado pero conscientes del valor de la marca y de su estrella guía.

Ellos apuestan por sus colaboradores, los acompañan, los hacen crecer y los retienen, porque el mayor valor de cualquier empresa o firma, sin importar su tamaño, es su capital humano. Y el talento local del país es de altos estándares, confiesan Samuel y Christian.

De lo micro a lo macro

— RI: ¿Cómo trabajar en un mercado pequeño y cuál es su valor agregado?

— SB: Costa Rica es un mercado muy pequeño comparado con otros países (EE.UU., Europa, Brasil, India, China y Medio Oriente), y hasta comparado con otras ciudades latinoamericanas, pero tenemos una cuna de talento que es capaz de adaptarse a mercados internacionales en los cuales los estándares son muy altos. Hemos sabido apalancar el talento para desarrollar proyectos en 12 países del continente y hasta damos apoyo a las oficinas de Gensler en Inglaterra, Medio oriente, México y Brasil.

“Hemos buscado a los mejores, lo hemos capacitado y echado a nadar, damos servicio a un mercado global desde un mercado local pequeño”.

— CW: El gran secreto de nuestra empresa es que el 85% de nuestro negocio viene de clientes repetitivos; es decir, de empresas que nos contratan una y otra vez para diversos proyectos. Nos focalizamos en las relaciones a largo plazo con los clientes. Sabemos que son parte importante de nuestro equipo y se trabaja mano a mano con ellos, nos acomodamos a sus necesidades

Diversificación y detalle

Gensler está muy diversificada como empresa de servicios y ofrecen cerca de 50 áreas de especialización y en cada una hay expertos y van creciendo regional y globalmente; hay desde diseño de producto y estrategia de marca, hasta el diseño de ciudades de gran escala, diseño urbano, aeropuertos, edificios de oficinas para diversas formas de negocios, centros comerciales, para salud y bienestar, hotelería y hasta retail.

“Nosotros no somos una franquicia, somos una empresa multinacional, esta es una sucursal de Gensler en Costa Rica”, explica enfático Wolff.

Aquí el talento se cuida tanto que una persona colaboradora puede ir creciendo hasta ser socios de ella. De hecho, el 51% de las acciones de la compañía es de los socios y el 49% de los empleados, que suman actualmente más de 200.

La cantidad de personal de Gensler a escala global aglutina a más de 5,000 empleados en 46 oficinas en todo el mundo.

Y sus trabajos pueden ser desde soluciones sociales para una albergue de personas adultas mayores hasta un centro de convenciones de primer nivel.

Si bien no tienen oficialmente un área de responsabilidad social, esa misión colaborativa se cumple con el proyecto GSer, que se alimenta de la ayuda de todo el personal con alguna causa social.

Cautela innovadora

La situación económica mundial es incierta y cambiante y eso lo tienen claro quienes lideran la marca aquí. Samuel confiesa que la situación de desaceleración económica los obliga a manejarse con cautela en el entorno mundial, cuidar la inversión, enfocarse en clientes estratégicos.

Por ello, tienen entre manos el desarrollo de varios proyectos como uno mixto de más de 100.000 metros de área en Heredia, el Centro de Convenciones que impulsa el Ministerio de Turismo, la remodelación de intervención urbana de la Universidad Latinoamericana de Ciencia y Tecnología (ULACIT) y hasta la recuperación de senderos del Parque Nacional de Guayabo.